Ambientada en Fermanagh (Irlanda) en el año 1885, Death and Nightingales se sitúa en una época en la que reina la traición, el espionaje y la venganza. Allí reside Beth Winters, una joven que, al cumplir 25 años decide unirse al cautivador Liam Ward, huyendo de los deseos de su protestante padrastro Billy. De esta manera, la ficción se convierte en un drama en el que una mujer trata de luchar por controlar su propio destino, haciendo frente a los obstáculos y las tensiones políticas y culturales. Asimismo, el dolor y la traición funcionan como elementos claves en este título.